Originario de Europa y Asia, naturalizado en Colombia. Aunque se conoce su presencia desde hace varias décadas en el país y ya se encuentra extendido en partes de las cordilleras Oriental, Central y el sur del país, parece que sigue expandiéndose rápidamente, ayudado por su numerosísima producción de semillas. Crece en bordes de caminos, lotes abandonados y potreros. Por ser tan espinoso, el ganado no lo come. Sus flores son muy ornamentales y son asiduamente visitadas por abejas y abejorros. Sus semillas tiernas son consumidas por chisgas (Carduelis).